jueves, 4 de diciembre de 2014

EL TIEMPO: LA MEJOR EXPRESIÓN DE AMOR


EL TIEMPO:
 LA MEJOR EXPRESIÓN DE AMOR


Es posible evaluar la importancia que le asignamos a algo considerando el tiempo que estamos dispuestos a dedicarle. Cuanto más tiempo le dedicamos a algo, más evidente resulta la relevancia y el valor que tiene para nosotros. Si quieres conocer las prioridades de una persona, fíjate en cómo usa el tiempo.

El tiempo es el regalo más preciado que tenemos porque es limitado. Podemos producir más dinero, pero no más tiempo. Cuando le dedicamos tiempo a una persona, le estamos entregando una porción de nuestra vida que nunca podremos recuperar. Nuestro tiempo es nuestra vida. El mejor regalo que le puedes dar a alguien es tu tiempo. 

No es suficiente decir que las relaciones son importantes: debemos demostrarlo en nuestras acciones, invirtiendo tiempo en ellas. Las palabras por sí solas nada valen: "No solamente debemos decir que amamos, sino que debemos demostrarlo por medio de lo que hacemos". Las relaciones exigen tiempo y esfuerzo. Amor se deletrea así:
<<T-I-E-M-P-O>>.

La esencia del amor no es lo que pensamos o hacemos o aportamos a los demás; antes bien, es cuánto entregamos de nosotros mismos. A los hombres, en particular, les cuesta entender esto. Muchos dicen: <<No puedo entender a mi esposa ni a mis hijas. Les proveo todo lo que necesito.

Qué más quieren?>>. ! TE QUIEREN A TI !. Quieren tu ojos, tus oídos, tu tiempo, tu atención, tu presencia, tu interés: TU TIEMPO. 

El mejor regalo de amor no son los diamantes ni las rosas ni los dulces. Es brindar tu concentración. El amor se concentra tanto en otra persona que por un instante uno se olvida quien es. La atención dice:
<<Te valoro tanto que te entrego mi bien más valioso: MI TIEMPO>>.

Siempre que dediques de tu tiempo, estarás haciendo un sacrificio, y el sacrificio es la esencia del amor.

ES POSIBLE DAR SIN AMAR, PERO NO SE PUEDE AMAR SIN DAR.

AMAR ES ENTREGARSE: DEJAR DE LADO MIS PREFERENCIAS, COMODIDAD, OBJETIVOS PERSONALES,
SEGURIDAD, DINERO, ENERGÍA Y TIEMPO PARA EL BENEFICIO DE LOS DEMÁS.

Recuerda siempre esto:

EL MEJOR REGALO QUE LE PUEDES DAR A ALGUIEN ES:

"TU TIEMPO"

EL EVANGELIO DE HOY: JUEVES 4 DE DICIEMBRE DEL 2014


Edificó su casa sobre roca
Adviento

Mateo 7, 21.24-27. Adviento. Dios es la Verdadera Sabiduría, y debemos creer y sentir que realmente la poseemos, porque Él quiso entregarse a nosotros. 


Por: José Ignacio Olvera Mendoza | Fuente: Catholic.net



Del santo Evangelio según san Mateo 7, 21.24-27
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: No todo el que me diga: Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial. Así pues, todo el que oiga estas palabras mías y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que edificó su casa sobre roca: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, y embistieron contra aquella casa; pero ella no cayó, porque estaba cimentada sobre roca. Y todo el que oiga estas palabras mías y no las ponga en práctica, será como el hombre insensato que edificó su casa sobre arena: cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos, irrumpieron contra aquella casa y cayó, y fue grande su ruina.

Oración introductoria
Jesús mío, aquí estoy para escucharte. Ahora que apenas inicia este tiempo de preparación para recibirte, te entrego mi corazón como mi primer y más apreciado regalo. Te regalo un corazón abierto para escucharte verdaderamente; que estén mis oídos atentos a tu Palabra sabia, llena de amor y misericordia. Que escuche para hacer de tu Palabra auténtica vida. Protégeme, por tanto, de toda distracción material y superficial en este tiempo para llenarme de Ti. Que invite a los demás a estar contigo, Único y Verdadero Bien de mi vida. Gracias por último, por permitirme ahora tener un corazón abierto.

Petición
Señor, te pido humildemente un corazón sabio, un corazón consciente de que Tú eres lo primero y lo más grandioso de mi vida.

Meditación del Papa Francisco
¿Es solamente un sentimiento, un estado psicofísico? Claro que si es solamente esto no se pueden construir encima nada que sea sólido. En cambio si el amor es una realidad que crece, y podemos decir como ejemplo, como se construye una casa. Crece y se construye como una casa. Y la casa se construye juntos y no cada uno por su lado. Construir aquí significa favorecer el crecimiento.
Ustedes se están preparando para crecer juntos, para construir esta casa, para vivir juntos para siempre. No la cimienten en la arena de los sentimientos, que van y vienen, sí en cambio en la roca del amor verdadero, el amor que viene de Dios. La familia nace de este proyecto de amor que quiere crecer, de la misma manera que se construye una casa, que sea lugar de afecto, de ayuda, de esperanza, de apoyo. Pero todo junto: afecto, ayuda, esperanza, apoyo. (Papa Francisco, 14 de febrero de 2014)

Reflexión 
Dios es la Verdadera Sabiduría, y debemos creer y sentir que realmente la poseemos. La poseemos porque Él quiso entregarse a nosotros y nosotros libremente podemos acogerlo. Acoger su sabiduría es acoger su Palabra, y acoger su Palabra es vivir la síntesis del Evangelio que podríamos citarla en dos aspectos: Este es mi mandamiento: "Ámense los unos a los otros, como yo los he amado."(Jn 15, 12).

Y el otro aspecto indica cómo nos ama Él: "Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna." (Jn 3, 16). Esta es la simplicidad de Dios: Dios es simple, nos ama gratuitamente sin que hayamos hecho algo para merecerlo y sencillamente nos quiere con Él para la toda la eternidad a través de Jesús.

Por tanto, tengamos un corazón abierto a la Palabra de Dios en este tiempo y no temamos compartir nuestra reflexión con aquellos que nos rodean, ya que todo hombre está llamado a conocer la Verdad, a conocerle a Él íntimamente y alcanzar la Eternidad con Él y en Él.

Propósito
Haré una oración espontánea junto con algún ser querido (hijo, hermano, marido, esposa, pariente, amigo...) donde le pida a Dios que me conceda la gracia de prepararme auténticamente para la Navidad.

Diálogo con Cristo
Jesús mío, Tú conoces bien mi vida, conoces quién soy y no hay nada oculto ante Ti. Gracias porque hoy puedo acercarme más a Ti. Dame la fortaleza necesaria para ser constante en mis propósitos y para que viva con alegría este día, pues lo comparto contigo. Por favor, que cada día te conozca más, para amarte más y darme más a los demás. “Pidamos a Dios con confianza la sabiduría del corazón por intercesión de Aquella que acogió en su seno y engendró a la Sabiduría encarnada, Jesucristo, nuestro Señor. ¡María, Sede de la Sabiduría, ruega por nosotros!” (Benedicto XVI, Ángelus, 20 de septiembre de 2009).


“Los discípulos del Señor están llamados a dar nuevo «sabor» al mundo, y a preservarlo de la corrupción, con la sabiduría de Dios, que resplandece plenamente en el rostro del Hijo, porque él es la «luz verdadera que ilumina a todo hombre» (Jn 1, 9). Unidos a él, los cristianos pueden difundir en medio de las tinieblas de la indiferencia y del egoísmo la luz del amor de Dios, verdadera sabiduría que da significado a la existencia y a la actuación de los hombres.” (Benedicto XVI, Ángelus, 6 de febrero de 2011).

PAPA FRANCISCO: LOS SANTOS ESCONDIDOS EDIFICAN SOBRE LA ROCA



Francisco en Sta Marta: 
los santos escondidos edifican sobre la roca
El Santo Padre, en la homilí­a de este jueves, recuerda la santidad cotidiana y pide no poner nuestra esperanza en cosas que hoy están pero mañana no


Ciudad del Vaticano, 04 de diciembre de 2014 (Zenit.org) 


El santo padre Francisco ha querido recordar hoy a los santos escondidos, hombres, mujeres, padres y madres de familia, enfermos, sacerdotes que ponen en práctica todos los días el amor de Jesús y esto "da esperanza". Así lo ha recordado durante la homilía matutina en la misa celebrada en Santa Marta.


De este modo, el Papa ha comentado el Evangelio de la casa construida sobre la roca o sobre la arena, recordando que el verdadero cristiano es el que pone en práctica la Palabra de Dios, no basta decir que tiene fe. Por eso, el Pontífice ha invitado a no ser "cristianos de apariencia", cristianos maquillados, porque cuando llega la lluvia el maquillaje se va.

A propósito, el Santo Padre ha advertido que no basta pertenecer a una familia muy católica o a una asociación o ser un benefactor, si no se sigue después la voluntad de Dios. Así, el Papa ha observado que "muchos cristianos de las apariencias" "caen ante las primeras tentaciones", porque "no hay sustancia ahí", han construido sobre la arena.

Sin embargo, hay otros ejemplos. Muchos santos "en el pueblo de Dios -no necesariamente canonizados, pero santos- muchos hombres y mujeres que ponen en práctica el amor de Jesús. Muchos". Y estos son, según ha explicado Francisco, los que construyen la casa sobre la roca, que es Cristo.

De este modo, el Papa ha invitado a pensar en los más pequeños, en los enfermos que ofrecen sus sufrimientos por la Iglesia o por otros. También ha pedido pensar en muchos ancianos que están solos, que rezan y ofrecen. O en madres y padres de familia que llevan adelante con mucho esfuerzo a su familia, la educación de los hijos, el trabajo cotidiano, los problemas, ... pero lo hacen siempre "con la esperanza en Jesús, que no presumen, pero hacen lo que pueden", ha explicado. Son los "santos de la vida cotidiana", según ha afirmado el Papa.

Al respecto, el Obispo de Roma ha invitado de nuevo a pensar en todos los sacerdotes que no se hacen ver pero que trabajan en sus parroquias con amor, "la catequesis a los niños, el cuidado a los ancianos, a los enfermos, la preparación a los recién casados..." Tal y como ha recordado Francisco, todos los días "es lo mismo", pero ellos "no se aburren porque en su fundamento está la roca. Es Jesús, es esto que da santidad a la Iglesia, es esto que da esperanza", ha exclamado en la homilía.

A continuación el Santo Padre ha pedido pensar mucho en la santidad escondida que hay en la Iglesia, "cristianos que permanecen en Jesús", y son "pecadores" porque todos lo somos.

Y a veces, alguno de estos cristianos comente un pecado grave, pero se arrepiente, pide perdón y esto es grande: "la capacidad de pedir perdón, de no confundir pecado con virtud, saber bien donde está la virtud y donde el pecado", ha subrayado el Papa. Y estos están fundados --ha proseguido-- en la roca y la roca es Cristo. "Siguen el camino de Jesús, le siguen a Él".

Por otro lado, el papa Francisco ha hablado de "los soberbios, los vanidosos, los cristianos de apariencia" que "serán abatidos, humillados" mientras que "los pobres serán los que triunfarán, los pobres de espíritu, los que delante de Dios no se sienten nada, los humildes, y llevan adelante la salvación poniendo en práctica la Palabra del Señor".

El Obispo de Roma ha recordado que "hoy estamos, mañana no estaremos". Y citando a san Bernardo ha precisado: "Piensa, hombre, qué será de ti: pasto de gusanos". "Nos comerán los gusanos, a todos" "si no tenemos esta roca, acabaremos pisoteados", ha añadido Francisco en su homilía.

Para finalizar, el Pontífice ha invitado a pedir al Señor, en este tiempo de preparación a la Navidad, "estar firme en la roca que es Él, nuestra esperanza es Él". Y ha recordado que "nosotros somos todos pecadores, somos débiles, pero si ponemos la esperanza en Él, podremos ir adelante. Y esta es la alegría de un cristiano: saber que en Él hay esperanza, está el perdón, está la paz, está la alegría. Y no poner nuestra esperanza en cosas que hoy están y mañana no estarán".

martes, 4 de noviembre de 2014

La Cuidad de Dios - San Agustín


La Ciudad de Dios es la obra de más aliento, más orgánica y trascendental de la inmensa producción agustiniana. Por sus dimensiones arquitectónicas, su vasta concepción de Dios y del hombre y la amplitud panorámica que abre para el pensamiento y la acción, es la obra más celebrada de San Agustín. Por ella se le reconoce como el creador de la llamada Filosofía de la Historia. La Vida de San Agustín, escrita por Posidio, su amigo durante cuarenta años y uno de sus más ejemplares discípulos, es no sólo la primera biografía del santo de Hipona, sino también una verdadera joya de la literatura hagiográfica.

Franciso explica por qué la Iglesia es Cuerpo de Cristo



12 Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, aunque son muchos, constituyen un solo cuerpo, así también es Cristo. 13 Pues por[a] un mismo Espíritu todos fuimos bautizados en un solo cuerpo, ya judíos o griegos, ya esclavos o libres, y a todos se nos dio a beber[b] del mismo Espíritu. 14 Porque el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos. 15 Si el pie dijera: Porque no soy mano, no soy parte del cuerpo, no por eso deja de ser parte del cuerpo. 16 Y si el oído dijera: Porque no soy ojo, no soy parte del cuerpo, no por eso deja de ser parte del cuerpo. 17 Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿qué sería del[c] oído? Si todo fuera oído, ¿qué sería del[d] olfato? 18 Ahora bien, Dios ha colocado a cada uno de los miembros[e] en el cuerpo según le agradó. 19 Y si todos fueran un solo miembro, ¿qué sería del[f] cuerpo? 20 Sin embargo, hay muchos miembros, pero un solo cuerpo. 21 Y el ojo no puede decir a la mano: No te necesito; ni tampoco la cabeza a los pies: No os necesito. 22 Por el contrario, la verdad es que los miembros[g] del cuerpo que parecen ser los más débiles, son los más necesarios; 23 y las partes del cuerpo que estimamos[h] menos honrosas, a éstas las vestimos con[i] más honra; de manera que las partes que consideramos más íntimas[j], reciben un trato más honroso, 24 ya que nuestras partes presentables no lo necesitan. Mas así formó[k] Dios el cuerpo, dando mayor honra a la parte que carecía de ella, 25 a fin de que en el cuerpo no haya división[l], sino que los miembros tengan el mismo cuidado unos por otros. 26 Y si un miembro sufre, todos los miembros sufren con él; y si un miembro es honrado[m], todos los miembros se regocijan con él. 27 Ahora bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno individualmente un miembro de él.

martes, 20 de mayo de 2014

Jesús, la vid verdadera



Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. 2 Toda rama que en mí no da fruto, la corta; pero toda rama que da fruto la poda[a] para que dé más fruto todavía. 3 Ustedes ya están limpios por la palabra que les he comunicado. 4 Permanezcan en mí, y yo permaneceré en ustedes. Así como ninguna rama puede dar fruto por sí misma, sino que tiene que permanecer en la vid, así tampoco ustedes pueden dar fruto si no permanecen en mí. 5 »Yo soy la vid y ustedes son las ramas. El que permanece en mí, como yo en él, dará mucho fruto; separados de mí no pueden ustedes hacer nada. 6 El que no permanece en mí es desechado y se seca, como las ramas que se recogen, se arrojan al fuego y se queman. 7 Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran, y se les concederá. 8 Mi Padre es glorificado cuando ustedes dan mucho fruto y muestran así que son mis discípulos. 9 »Así como el Padre me ha amado a mí, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor. 10 Si obedecen mis mandamientos, permanecerán en mi amor, así como yo he obedecido los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. 11 Les he dicho esto para que tengan mi alegría y así su alegría sea completa. 12 Y éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. 13 Nadie tiene amor más grande que el dar la *vida por sus amigos. 14 Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. 15 Ya no los llamo *siervos, porque el siervo no está al tanto de lo que hace su amo; los he llamado amigos, porque todo lo que a mi Padre le oí decir se lo he dado a conocer a ustedes. 16 No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisioné para que vayan y den fruto, un fruto que perdure. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre. 17 Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros.